Una iniciativa de AIDIMME, FEMEVAL, FEVAMA, UNIÓN DE MUTUAS, UNIMAT prevención, y VALMETAL, aborda los retos de la Industria 4.0 en materia de seguridad y salud laboral en un estudio pionero en España
“R-Evolución Industrial: Prevención y retos 4.0” es el título de este proyecto que aborda desde tres visiones -empresarial, preventiva e innovadora-, los riesgos laborales emergentes de la incorporación de las tecnologías 4.0 en el entorno de trabajo.
Esta guía es la primera parte de un trabajo de investigación impulsado por el Instituto Tecnológico Metalmecánico, Mueble, Madera, Embalaje y Afines (AIDIMME), la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (FEMEVAL), la Federación Empresarial de la Madera y Mueble de la Comunidad Valenciana (FEVAMA), Unión de Mutuas, Unimat Prevención y la Agrupación Empresarial para la Innovación de los Procesos Productivos del Metal y Afines (VALMETAL).
Este trabajo fue presentado a los medios de comunicación el pasado día 15 de mayo, y posteriormente se presentó a las empresas y profesionales en un encuentro presidido por la directora del Instituto Valenciano de Seguridad y Bienestar en el Trabajo, INVASSAT, Cristina Moreno, en la sede de FEMEVAL. La directora general estuvo acompañada por el presidente de FEMEVAL, Vicente Lafuente, el presidente de AIDIMME, Fernando Saludes, y el director gerente de Unión de Mutuas, Juan Enrique Blasco.
Durante la presentación a los medios, el presidente de FEMEVAL, Vicente Lafuente, explicó que “con la primera fase de esta iniciativa ofrecemos pautas para hacer de la Industria 4.0 más productiva, más segura y más humana. Porque la salud y seguridad laboral son valores innegociables y no hay nada más improductivo que un accidente, precisó”.
“Por eso ponemos el foco en las personas, porque cualquier transformación, sea digital o no, comienza por ellas, subrayó Lafuente, quien destacó que en un momento en el que la tecnología se ha situado como telón de fondo en nuestras vidas, tenemos que articular y poner en práctica estrategias para que las personas trabajadoras no paguen un peaje emocional ni físico”, señaló el presidente de FEMEVAL.
Evolución industrial revolucionada
Por su parte, el presidente de AIDIMME, Fernando Saludes, indicó que “el conocimiento científico y tecnológico es fundamental, pero no es suficiente para lograr el éxito digital. Las implicaciones son profundas, de cambios sin precedentes, de cambios de estructuras productivas, de ahí la revolución industrial que acertadamente este proyecto interpreta como evolución industrial revolucionada, si se me permite la expresión”.
Para Saludes, la Industria 4.0 y sus habilitadores digitales aportan las soluciones para reconvertir y optimizar los procesos productivos, y abren paso a otros retos que hay que trabajar día a día, como es la integración de las personas y su bienestar. “Cada empresa es distinta, y la diversidad tecnológica resuelve múltiples situaciones, pero si las dificultades son similares, el reto único: alcanzar una mayor integración productiva de los procesos y los recursos humanos que armonice la relación hombre-máquina y su entorno de trabajo”, resaltó el presidente del Instituto Tecnológico AIDIMME.
Por eso entendemos que el Instituto Tecnológico que con orgullo represento, es un soporte imprescindible para impulsar estos cambios progresivamente, afirmó Saludes, quien aseguró que permanece alerta para proporcionar los recursos técnicos que habiliten el acceso a la transformación digital, sobre la base de la adecuada formación y el conocimiento para minimizar los riesgos y superar los desafíos que implica la realidad que recoge esta guía, apostilló.
De otro lado, el director general de Unimat Prevención, Ignacio López-Lapuente, señaló que “este proyecto es absolutamente novedoso como ya requiere el futuro de la prevención” y permite a “los sectores de la madera, el mueble y el metal contar con soluciones preventivas proactivas, posibilitándoles liderar el cambio tecnológico con técnicas de adaptación basadas en la seguridad y la salud que generen confianza y bienestar para la empresa y las personas trabajadoras”.
Estudio pionero
Se estima que en 2025 habrá más de 50.000 millones de dispositivos IOT conectados y que los 2,4 millones de robots industriales registrados en el mundo en 2017, aumentarán hasta 3,8 millones en 2021.
Un escenario que van a potenciar la aparición de riesgos laborales emergentes tanto psicosociales, organizacionales, de seguridad, higiene como de ergonomía y ciberseguridad. Entre ellos, se introducen conceptos como tecnoestrés, tecnoadicción o tecnofobia, el trabajo nómada sin límites, vulnerabilidad, aislamiento social, inseguridad laboral, sedentarismo asociado con obesidad, problemas éticos por el acceso ilimitado a información, así como una invasión del ámbito personal o un fuerte rechazo inicial por miedo a lo desconocido o por verse en la obligación de salir de la zona de confort por parte del personal de más edad o menos formado en tecnologías digitales.
Ante este horizonte, el proyecto de estas seis entidades plantea una hoja de ruta con estrategias para ayudar a las compañías a eliminarlos, reducirlos o prevenirlos. Actuaciones como técnicas de mentoring; el business-game para adquirir conocimientos en entornos distendidos; códigos éticos que contemplen el teletrabajo y el derecho a la desconexión; evaluaciones de riesgos psicosociales; el uso de cobots para mejorar las condiciones ergonómicas o de dispositivos wearables para prevenir y proteger la seguridad y salud, así como la importancia de incorporar sistemas de protección personal inteligentes (smart EPIs).
Según el estudio, la transformación digital conlleva también la aparición de nuevos perfiles profesionales y la adquisición de competencias transversales centradas en los ámbitos más humanos que las máquinas no pueden alcanzar. Los profesionales del futuro más demandadas requerirán conocimientos de diseño, tecnología y programación (expertos en analítica de Datos, Data Scientist, Big Data y robótica, Chief Digital Officer y expertos en digitalización de procesos, robótica e ingenieros); y habilidades humanas analíticas, resolutivas, de liderazgo e influencia social, como profesionales de ventas y marketing, gerentes, perfiles de innovación y personal de servicio al cliente. Como dato cabe destacar que en España en 2020, habrá 800.000 puestos vacantes de nuevas tecnologías en el ámbito de las TIC como desarrolladores, analistas de datos, etc. Y en 2022 el grupo de profesiones emergentes aumentará su participación en el empleo un 40%.
R-Evolución Industrial: Prevención y retos 4.0” es un proyecto vivo en constante evolución y del que hoy se ha presentado la primera fase. Toda la información y materiales del proyecto (vídeos, infografías y la Guía completa con la descripción de los nuevos riesgos transversales, estrategias de actuación, retos y tendencias) están disponibles en la web www.prlcuatropuntocero.es.
Una plataforma que se irá actualizando con nuevos contenidos y en la que se pondrá el acento en destacar que las nuevas tecnologías en sí mismas no implican efectos positivos o negativos. Es la forma en la que se utilizan la que determina unos resultados beneficiosos o perjudiciales, según destaca la propia Guía.
Artículo publicado en actualidad.aidimme.es